Valparaíso, al igual que Roma, forma parte de un grupo de ciudades que a primera vista no me impactaron y hoy me tienen profundamente enamorado.
En una de mis tantas visitas a la costa chilena, recuerdo que al salir de Viña del Mar, tomaba la Av. Argentina (ya en Valparaíso) y me preguntaba: “que le vieron a esta ciudad los que dicen que les gusta?“.
Hasta que unos amigos chilenos me llevaron al Cerro Alegre y al Cerro Concepción. Ahí entendí todo. Valparaíso tiene 40 cerros (Alegre, Concepción, Mariposas, Los Placeres, etc.) y todos son distintos. Pero vayamos a lo más importante: donde queda Valpo (como le dicen algunos chilenos) y como se llega.
Valparaíso es la tercera ciudad y área metropolitana con mayor población de Chile. Se encuentra el Congreso Nacional por lo que allí trabajan los senadores y diputados de la nación, logrando “cierta descentralización” de Santiago, la capital chilena. También es sede de otras importantes instituciones como los servicios Aduanas, de Pesca y Acuicultura y el Ministerio de Cultura. Tiene un gran puerto, donde recalan muchos cruceros durante el año.
Valparaíso se encuentra a 115 kms. de Santiago. Dependiendo de la velocidad y lo que conozcas de la ruta, vas a tardar entre 1 hora y media y 2 horas. Siempre y cuando no te detengas en el Valle de Casablanca donde hay varias “viñas” para visitar (en Chile “bodega” se les dice a los depósitos), como Indomita, Veramonte, Viñamar y Quintay (entre muchas otras). Si vas por el día mi recomendación es que las pases de largo y te centres en la costa.
Si no vas en auto (propio o alquilado), la empresa de buses TURBUS sale desde Santiago todos los días cada 20 minutos, desde las 6.30 am y su ultimo micro vuelve las 22.00 hs. Es decir, podés pasar todo el día y el tiempo alcanza. Los pasajes ida y vuelta arrancan en USD 10 aproximadamente. Es un paseo para quedarse una noche y visitar Viña del Mar (se encuentra a 5 kms., aunque cuesta darse cuenta cuando termina Viña y empieza Valparaíso), elegir un paseo por el Valle de Casablanca a la ida y/o vuelta (no te pierdas la cepa emblemática chilena: CARMENERE!) o visitar Isla Negra, la casa/museo de Pablo Neruda donde descansan sus restos con la que fue su última mujer, Matilde Urrutia. (Isla Negra acá te lo cuenta el gran blogger @leonvivaldi)
Entre muchos otros atractivos, vas a encontrarte con los ascensores funiculares, que si bien son una atracción turística en si misma, son un medio de transporte para conectar la parte alta de los barrios.
Es tanto lo que hay para hacer que yo lo resumo, seguramente en forma injusta, en visitar los cerros Alegre y Concepción. Y dentro de lo mucho que hay, no te voy a recomendar visitas específicas. Te recomiendo caminar, perderte, volver a ubicarte y volver a perderte. Sus calles son empinadas o planas, de adoquines por momentos y está lleno de murales y paredes con grafitis.
Te vas a encontrar con miradores al puerto y la bahía. Podrás identificar las playas de Viña del Mar y quizás hasta las de Reñaca. Dicen, yo no estuve, que presenciar el año nuevo en Valparaíso es uno de los espectáculos más increíbles que no podrás olvidar facilmente. El show de fuegos artificiales desde el mar, organizado por la municipalidad, es uno de los 10 más importantes del mundo.
Los cerros están llenos de cafés, restaurantes, hostales y hoteles que guardan una arquitectura muy particular.
Mi recomendación es que te regales sentarte en el café que más te guste, converses con su gente local, preguntes sobre su historia, cultura y el motivo por el cual viven allí.
Al mediodía visitá alguno de sus restaurantes, ojalá con vista a la bahía o al puerto, y disfrutá de excelentes panorámicas.
La batería de tu celular debe estar full. Te vas a cansar de sacar fotos cada unos cuantos pasos.
El atardecer te va a regalar un espectáculo nuevo. Te va a costar tomar la decisión de regresar. El cerro comienza a encenderse y te vas a volver a impactar. De día y de noche son espectáculos tan diferentes como cautivantes. Mesas con velas encendidas te invitan a que vuelvas a sacar tu billetera sin culpa. No te voy a recomendar un restaurant, hay muchos y muy buenos.
Lo que si me voy a animar a recomendarte es un hotel que me encantó. El Hotel Brighton. Había escuchado buenos y malos comentarios. Pero su ubicación lo hacía tan tentador que fuimos a almorzar y lo miramos desde afuera. Otra vez volvimos y nos hospedamos. Nos fué bárbaro. Reservamos una habitación con vista a la Bahía de Valparaíso y fué como retroceder 300 años. Me creía William Shakespeare…
Me animo a decirte que si no te interesa el shopping, perfectamente vale la pena viajar hasta Santiago en avión, no quedarte allí y tomar un auto en el aeropuerto para pasar el fin de semana en Valpo. No te vas a arrepentir. Si te quedan unas horas a la vuelta, en este post te recomiendo algunas cosas para visitar en la capital chilena: Santiago de Chile.
No te preocupes, hay tiempo para conocer Santiago. Pero a Valparaíso, no te lo podés perder.
4 agosto, 2016 a las 4:03 pm
Muy interesante. No tenía idea de que el Congreso funciona en Valparaíso. Y mucho menos que es tan linda! Justo acabo de terminar de leer La hija de la fortuna de Isabel Allende y gran parte de la historia transcurre en Valparaíso, pero en el siglo pasado. Tus fotos me dan una idea de lo que pudo haber sido. En esa época había una colonia británica grande por el comercio del puerto, no me extraña que ese hotel se llame Brighton! Seguramente han quedado más nombres e historias.
4 agosto, 2016 a las 4:05 pm
Uhh, debería leer ese libro con lo mucho que me gusta Valparaiso. Gran dato lo de la colonia británica. Hay muuuucho para contar, tiene historias y mitos (que a veces se entremezclan). Gracias por pasar y comentar Ana!
4 agosto, 2016 a las 4:13 pm
Muy buen post Juan!. A mi me fascina, estuve dos veces, la última en 2013 cuando nos fuimos a recorrer con el auto la region de Valpo a Concon (que bien que se come por favor).
También pasé por Isla Negra, que está debajo de Valpo, ahí está la casa de Pablo Neruda, la más importante de las 3 que tenía, y donde podés encontrar todas sus colecciones. Descansan sus restos, junto a los de su última esposa mirando al pacífico. Fijate en el blog que lo reporté. ¡Abrazo!
4 agosto, 2016 a las 5:01 pm
Se come increible!!! en Maitencillos hay un restaurant que se llama “La Canasta”… por Dios!
Ya miro el blog, estuve pero me gusta leer otra optica del mismo lugar. Gracias por comentar!! abrazo.
4 agosto, 2016 a las 5:28 pm
Me pasó igual. Fui, por azar a Valpo a buscar a mis papás que llegaban en un crucero (yo había hecho el mismo crucero el año anterior). Pasé una tarde / noche pero me quedé con gusto a poco.
Me llamó la atención la cantidad de turismo extranjero y ahí, averiguando, me enteré que es un destino muy promocionado en Europa.
¡Habrá que darle otra oportunidad!
4 agosto, 2016 a las 5:32 pm
Hola Natalia. si, se la merece! dale una nueva oportunidad que no te vas a arrepentir. Saludos y gracias por visitar el blog!
4 agosto, 2016 a las 10:27 pm
Propongo un premio para el fotógrafo…
4 agosto, 2016 a las 10:28 pm
Llevarlo de nuevo a Valparaíso?
5 agosto, 2016 a las 12:39 am
Claro que si…
16 agosto, 2016 a las 4:06 am
En breve estaré viajando a Santiago. Mi abuela me habló tanto sobre lo lindo que es Valparaiso que quiero ir a conocerlo! Tu post me lo terminó de confirmar!
Vamos a alquilar auto tanto para recorrer Santiago, como para ir a Valparaiso y Viña. Quería consultarte qué tal es el tránsito alla, si hay alguna diferencia en las normas de tránsito que uno deba saber de antemano para no mandarse ninguna macana, y si es necesario llevar registro internacional de conducir.
Muchas gracias!! y felicitaciones por el blog! Escribís muy lindo 🙂 y soy un jurado bastante exigente jaja 🙂
16 agosto, 2016 a las 11:30 am
Hola Puli!! muchas gracias por tu comentarios y tus lindas palabras.
Dentro de Santiago manejar no es un problema. De hecho, si no fuera que vas a la costa casi te digo que no hace falta tener auto. En Chile una cosa que me llamó la atención, es que con el semáforo en rojo, está permitido avanzar si doblás a la derecha. Es decir, suele estar indicado, y podés incorporarte a una avenida incluso si tu intención es doblar (no cruzar obviamente) y te indica hacerlo con precaución. Supongo que es para agilizar el transito y reducir embotellamientos y contaminación. Creo que en Argentina no funcionaría.
Averiguá como te cobrarán los peajes. Dentro de Santiago, no existen casillas de peaje. Se pasa por un sistema automático sin barreras ni casillas. Casi no te das cuenta cuando pasás por un arco que te cobra. Sentirás un “bip” en el “pase” y te cobraron. Es bueno, porque evitás parar, pero no es un tema económico en Santiago. Muchas veces se pueden evitar en distancias cortas y la sensación de “no pagar” te puede generar una falsa sensación de no pago que luego obviamente pagarás.
Registro internacional de conducir. Yo creo que no hace falta. Es un tema que no está del todo claro. Pero viviendo allí por 4 años, muchas veces los carabineros me pararon para controles y nunca, nunca me indicaron la necesidad del registro internacional.
Cualquier otra duda en que te pueda ayudar, avisame! saludos!!
16 agosto, 2016 a las 12:33 pm
Muchísimas gracias por la info! Me viene muy bien! Me llevo tus posts como guía! Besos!
9 enero, 2018 a las 6:40 pm
Primera vez comentando por acá (creo). Te leo no hace mucho. Como Mendocino, ir a Chile es parte de nuestra cultura 😛 he ido a Valparaíso muchas veces y no logro encontrarle la vuelta. Viña me encanta (eso puede que ayude a que no me guste Valpo). Pero obviamente todo va en gustos. Fui a Valparaíso a pasar Año Nuevo hace unos 10 años (que en realidad los fuegos se tiran en simultáneo en la costa desde ahi hasta Reñaca) es una experiencia muy buena y definitivamente vale la pena ir.
16 enero, 2018 a las 3:09 pm
hola Renzo, como andás! Viví en Chile 4 años y en Chacras de Coria otros 2 años. Por la costumbre de viajar a Buenos Aires para las fiestas me perdí año nuevo en Valparaíso durante esos 6 años “cerca”. Me quedé con las ganas!! gracias por tu paso por Juano Flyer. Bienvenido!!!
14 julio, 2018 a las 4:00 am
Hola Juano!! me contagias, con tu relato, las ganas de conocer Valparaíso y Viña, las pase por la ruta haciendo Bariloche – Machu Pichu en auto en 2011….justo cuando explotó el volcán Puyehue, es tan diferente el paisaje …en el sur tan verde y en el norte tanta piedra y minería…. y siempre el Pacífico te acompaña! yo amo las playitas perdidas al sur de San Juan de la Costa, Pucatrihue, Tril Tril…..salvajes, solitarias….maravillosas… Me encanta tu blog (hace poco lo descubrí) y el proyecto del camino a Santiago…seguiré en contacto.!
15 julio, 2018 a las 9:49 pm
hola Adriana! que viaje hasta Machu Pichu. Es uno de mis pendientes!
Bienvenida a Juano Flyer, espero podes contagiarte las ganas de hacer el Camino de Santiago 🙂
Nos seguimos leyendo!
Juano
10 enero, 2020 a las 7:42 am
Super interesante el articulo!!!