En una de las veces que tuve la oportunidad de viajar a Berlín, reservé un Free Walking Tour en SANDEMANs New Berlin Tours. http://www.newberlintours.com/es.html
Se trata de un tour gratuito (a voluntad) que dura aproximadamente 2,5/3 hs. Elegí uno en español y resultó espectacular. Salen de la Puerta de Brandeburgo.
Recorrés los puntos más destacados de Berlin caminando y al final te piden una contribución a voluntad. Obviamente nuestro guía se esforzó mucho ya que de su performace dependía su cobro variable. Me dijeron que existen en otras ciudades y no creo encontrar mejor manera de aprender y ubicarse en una ciudad al llegar. No me voy a extender en el recorrido pero les puedo asegurar que caminando se visitan los puntos históricos más importantes de un lugar lleno de historia. Si bien no era la primera vez que visitaba Berlín, resultó ser un punto de inflexión a como la recorrería desde ese momento.
Al finalizar el recorrido, además de pasar “la gorra”, te ofrecen distintos tours que la misma empresa ofrece: Berlín Antiguo, Campo de Concentración Sachsenhausen, Berlín y el muro y Pub Crawl (entre otros). Este ultimo me quedó pendiente. Es un tour nocturno para mayores de edad recorriendo la vida nocturna de Berlin, especialmente bares y pubs.
En mi caso elegí la visita al Campo de concentración Sachsenhausen. Este campo es el mas cercano a la ciudad de Berlin y su ingreso es gratuito. Se pueden pagar 3 euros por un audioguía pero me resultaba más interesante contratar el tour (12 euros) para que un guía en español nos brinde la información desde el momento que salíamos de Berlín. Para muchos puede parecer duro y hasta quizás no le encuentren tanto sentido, pero creanme que recorrer un lugar tan desolador como doloroso termina siendo valioso. Pueden contarte muchas cosas y hacerse una idea gráfica a través de libros o películas. En mi caso no podía entender como el ser humano puede ser movilizado por el odio y permitir esto. Quería conocer más de la historia y recorrer uno de estos lugares. Nuestro guía nos contó que en la actualidad hay personas que opinan que un campo de concentración no debe mantenerse en pie ni ser restaurado, sino que debe hacerse en su lugar un parque o memorial. Otros creen que visitarlo es tomar conciencia de lo vivido sin esconder los errores del pasado. El Campo es visitado por alumnos de colegios secundarios alemanes con este fin. Coincido que es una experiencia para ser vivida y recordarlo una y otra vez para que jamás vuelva a suceder.
El campo de concentración Sachsenhausen se encuentra en las afueras de Oranienburg, localidad ubicada a 35 kms. de Berlín y funcionó desde 1936. Nosotros partimos con el guía desde Berlín. Primero en subte, luego en tren para llegar caminando hasta su puerta principal.
Ingresando al campo puede observase una frase Arbeit macht frei “El trabajo te hace libre” que resume lo que encontraremos dentro. Una puesta en escena hacia afuera, un infierno en su interior. Mucha gente en la época pensaba que los prisioneros eran tratados como “prisioneros-trabajadores” pero no imaginaban o no querían imaginar las torturas a la que eran sometidos.
Debajo está la vista desde el Ingreso. Hoy no están todos los pabellones o barracones. Pensar que en ese mismo lugar murieron aproximadamente 30.000 judíos, testigos de Jehová, homosexuales y soldados soviéticos estremece.
Los barracones fueron reconstruidos, no son los originales. Para su reconstrucción se usaron los mismos materiales. Esa mañana teníamos 10 grados bajo cero. El solo hecho de pensar que los prisioneros estuvieron allí con un único uniforme, pasando hambre, frío y hacinamiento impacta. Pero era lo de menos luego que, como imaginábamos, nos comentaran lo que allí sucedía. Vuelvo sobre este tema. Leerlo, imaginarlo e inclusive visualizarlo en una película, no se compara con estar allí.
El muro que dividía el campo de las casas de las personas que vivían a metros, hacía muy difícil imaginar lo que adentro se vivía.
Dentro del campo hay exposiciones fotográficas, replicas de los barracones y calabozos. La parte más dura es la zona donde se ubicaba la Zanja de ejecuciones, el Crematorio y la Cámara de gas.
Exterior de un pabellón de prisioneros
Habitación donde llegaban a convivir 200 prisioneros en condiciones inhumanas.
Baños
Ganchos donde prisioneros eran colgados a la vista del resto.
Cuando las fuerzas soviéticas ocuparon Berlín, este campo funcionó también como campo de concentración soviético.
Este lugar también puede conocerse en particular porque se llevó a cabo la operación Bernhard. Con mano de obra judía se falsificaron nueve millones de billetes, valorados en 650 millones de dólares. Muchos prisioneros de otros campos fueron seleccionados por su habilidad en dibujo y artes relacionadas para ser enviados a Sachsenhausen.
No voy a entrar en detalles específicos de las cosas que nos comentaron. Algunas, sino todas, son muy duras. He recibido comentarios de amigos y conocidos sobre visitar un lugar como este en vacaciones no les resulta un buen programa, donde buscan relajarse y divertirse.
Yo creo que de la visita se aprende muchísimo. Que debe conocerse en detalle lo que se vivió. La sensación de vergüenza por la atrocidad humana te embarga pero solo conociendo en profundidad esta locura no nos permitiremos como sociedad que vuelva a suceder.
23 mayo, 2016 a las 10:59 am
Tiene que haber sido terrible. Que espanto. Lo que es el odio y las ansias de poder llegan a enloquecer al ser humano. Gracias Juan por tus relatos que nos enriquecen. Un beso
23 mayo, 2016 a las 11:39 am
Gracias Margarita por darte una vuelta. Tal cual, un espanto. Me alegro que te gusten los relatos 🙂
23 mayo, 2016 a las 4:18 pm
Si bien he estado cerca de algunos campos de concentración, no me animo a visitarlos porque sé cuánto me van a conmover y cuán indignada voy a salir de ahí.
Celebro que sigan en pie, que la gente los visite y comprueben el horror vivido allí. para que esta triste parte de la historia, no se repita jamás.
Gracias por compartir tu experiencia.
Hasta pronto!
23 mayo, 2016 a las 4:30 pm
Hola Betty! es tal cual. Respeto a la gente que prefiere no ir y a la vez celebro que no se cierren. Un parque o memorial no va a generar el estado de conciencia que se necesita. Gracias por darte una vuelta y comentar!
4 julio, 2018 a las 8:52 am
Hola:
Muy interesante tu publicación, enhorabuena. Yo escribí hace tiempo un post de mis “reflexiones” acerca del campo de exterminio de Sachsenhausen tras visitarlo hace unos años. te dejo la URL por si es útil para tus visitantes.
https://www.raulprietofernandez.net/blog/reflexiones/campo-de-concentracion-de-sachsenhausen
Saludos
5 julio, 2018 a las 11:44 am
Muchas gracias. Lo voy a leer! Saludos y gracias por tu paso por Juano Flyer