Este post tiene 3 caminos que se unen en el final. Tuve la necesidad de escribirlo porque cuesta mucho intentar hablarlo con alguien sin ser interrumpido por la sensibilidad que produce el tema. No nos gusta hablar de la muerte y para mí no deja de ser un tema como cualquier otro del que deberíamos hablar más seguido.¿Qué tiene que ver con los viajes? vas a tener que recorrer cada camino y llegar hasta el final…
Camino 1: «La última lección»
Randy Pausch, profesor y científico norteamericano, fue invitado a dar una charla que era tradicional en la universidad en la que trabajaba: «La última lección«. El tema era el siguiente: ¿si tuvieras la oportunidad de dar una última conferencia sabiendo que vas a morir, que tendrías para decir?
Cómo muchas otras veces, esto me habrá llegado vía Facebook o email y no me generó mucha expectativa. Pero luego de verla, esta vez, me clavó una espina que tardé en procesar.
Randy fue diagnosticado con Cáncer terminal de Pancreas, quedándole de 3 a 6 meses de vida. Habiendo pasado un mes desde la noticia, esto decía: Charla en YouTube.
En un pasaje de la charla Randy dice «Intento ponerme a mí mismo en una botella que algún día aparecerá en la playa para mis hijos«. Por ese mismo objetivo de dejarles recuerdos imborrables, llevó al mayor Dylan (6) a nadar con delfines. Sabía que, con apenas 6 años, muy poco es lo que recordaría de él. Pero «nadar con delfines no es algo que olvidará fácilmente«. Por eso llevó al segundo, Logan (3), a Disney y se encargó de «presentarle» a su héroe, Mickey. Pero lo más difícil fue con Chloe (1), la pequeña. Le grabó videos con mensajes tan claros como contundentes y llenos de amor paternal.
Como padre de 3 hijos que también soy, quizás esta parte explique por qué su charla me dejó pensando por varios días. Asumir que voy a morir en la vejez es un error. Quizás suceda mañana, en una semana, en un mes o en 30 años. No tengo la certeza de Randy (lamentablemente falleció al año siguiente de dar la charla) pero estoy intentando vivir como si fuera a morir pronto. Las cosas se ven desde otra perspectiva.
Camino 2: frase en el subte de Paris.
Una mañana en París, yendo de excursión con mi esposa Florencia, me encontré con la siguiente frase escrita en la pared del subte: «El día que estés listo para morir, vivirás por siempre«.
La muerte ronda mi cabeza pero en forma positiva y esta frase ayudó a cerrar lo que estaba dando vueltas hace tiempo. No tuve la oportunidad de preguntarle a quien la escribió, pero la interpreto de la siguiente manera: a punto de cumplir 40 años yo ya estoy listo para morir. Tengo 3 hijos hermosos y una esposa grandiosa. Pude estudiar y trabajo hace 20 años en lo que me gusta. Disfruté y disfruto de mis padres. Veo a mis 2 hermanas disfrutar de sus familias. La vida ya me dió «todo». Sé que cuesta verlo de esta manera. Y creanme que me encantaría ver crecer a mis hijos, verlos terminar el colegio y si desean casarse estar ahí. Ojalá ver crecer a mis nietos. Pero el saldo en mi vida ya es acreedor. Y cada día que se sume a mi vida será un regalo. Estar listo para morir parece una locura, pero ahí leo lo positivo de la segunda parte de la frase: vivirás por siempre. Porque cada nuevo día que me quede, lo viviré con enorme gratitud. Ese «siempre» nadie lo sabe, pero más vale haber hecho todo lo que hubiese querido mientras pude.
Camino 3: viajar.
A todos nos gusta viajar pero hay que resignar algo si no contás con el dinero para hacerlo. Por suerte mis necesidades básicas están cubiertas y puedo pensar en ello. Pero ni con el deseo ni la buena onda se logra. Hace unos años me enteré de un personaje llamado Dave Bruno que tomó la siguiente decisión «Por mi trigésimo séptimo cumpleaños, el 12 de noviembre de 2008 voy a reducir mis artículos personales a sólo 100 cosas. Voy a vivir por lo menos un año (si Dios quiere) manteniendo un inventario de sólo 100 objetos. Este reto me ayudará a poner las cosas en su lugar y también a explorar mi convicción de que algo puede ser bueno cuando se sirve de un propósito mayor que la mera posesión…”
Inspirado por la historia de Dave y tantos otros que piensan algo similar (y leí en diarios y revistas), hace unos años inicié un proceso de reducción de bienes materiales. Y finalmente forzamos el proceso al mudarnos a una casa 50% más chica que la anterior. Y dos tercios más chica de la que vivíamos antes de esa. De esta manera tuvimos que deshacernos de la mitad de muebles, la mitad de juguetes, de las cosas de la cocina, de lo que teníamos para «vestir» 3 baños. Hoy vivimos 5 personas en un casa de 70 mts. cuadrados. Tenemos un solo auto cuando por momentos pareciera que hagan falta dos. Al principio costó, por momentos fue incómodo y hoy estamos bien. Nuestro presupuesto se redujo considerablemente. Ya no tenemos jardinero, no tenemos mucama, gastamos la mitad o menos en luz, agua y gas. Y esos recursos, mientras se pueda, se destinan para viajar.
Este proceso de 5 años a la fecha es donde los 3 caminos paralelos fueron convergiendo. Al menos en mi cabeza. Trato de vivir como si fuera a vivir poco tiempo más. Vivo menos apegado a lo material y cada año intento vivir con menos. La excepción: viajar. Hago cuanto puedo por viajar y ojalá cada día haga un poco más.
Al igual que Randy, intentaré dejar un recuerdo imborrable en el corazón de mis hijos. Y creo que nada que tenga que ver con lo material ellos lo recordarán de grandes. Pero sin dudas recordarán los viajes.
Este enero proximo viajaré con mi hijo mayor a Estados Unidos. El y yo. Solos. Es un regalo para El pero creo que seré yo el más beneficiado al tenerlo una semana «para mí solo». Hemos instaurado la regla familiar de que cuando cada uno de nuestros 3 hijos termine la primaria, hará un viaje con su padre o madre (según sexo del hijo viajero). Según el presupuesto, veremos el destino. Esto no es lo importante, sino un viaje donde se pueda, donde cada uno de ellos se sienta «hijo único» y 100% receptor de nuestra atención.
Aquí es donde se unen los 3 caminos. Vamos a morir. No sabemos cuando. Por lo pronto vivamos como si fuera a suceder pronto. Y viajemos. No solo en familia. Además de nuestra pareja, viajemos individualmente con nuestro papá/mamá. O con nuestro abuelo/a. O con nuestros hijos. O con tu mejor amigo/a. O con tu ahijado/a. Sorprendé a tu abuela con un día a Colonia, Uruguay. Llevate a tu mamá un fin de semana a un hotel en Capital Federal. Vayan al teatro, a cenar. Llevate a tu papá a pescar a San Martin de los Andes. Invitá a alguien que esté solo a unirse a tu viaje familiar.
Me llevó un tiempo este proceso de cambio. Quizás esté equivocado. Quizás no. Pero escribirlo me ayuda a ordenarlo y transmitirlo a aquel que le sirva analizarlo.
6 junio, 2016 a las 11:05 am
Hermoso post! Me hiciste emocionar y reflexionar!! Saludos
6 junio, 2016 a las 8:38 pm
Que bueno Puli! si eso se logró, escribirlo valió la pena!
22 agosto, 2020 a las 11:35 am
Gracias Juanoflyer !!!
6 junio, 2016 a las 11:36 am
Hola Juan! Que tema! Ya lo hablamos, hay un tabú tan grande sobre esto (me incluyo en el grupo que se incomoda con este tema) que siempre pasa lo que pones en el primer párrafo. Naturalizar algo que es natural, pero socialmente triste, creo es un proceso, y creo que la manera en que lo expresas es muy claro. Abrazo
6 junio, 2016 a las 8:39 pm
Hola Javito. Es un camino. De a pasos (algunos mas rapido otros mas lento) creo que es un tema que hay que ir abordando…. abrazo!
6 junio, 2016 a las 11:52 am
Mirá vos lo que me vengo a enterar… Felicitaciones por el Blog y por tan hermoso Post !!
Hermosa manera de empezar la semana…
Abrazo !!
6 junio, 2016 a las 8:40 pm
hola Pablo! Que bueno que te haya gustado. Es un tema «lindo» para debatir y reflexionar. Gracias por darte una vuelta por acá! Juano
6 junio, 2016 a las 9:53 pm
Abrazo grande !
6 junio, 2016 a las 11:59 am
Increíblemente precioso y muy conmovedor. Es muy real lo que escribiste. Cuántas cosas uno haría si supiera el día de su partida. Hay que vivir el hoy sanar heridas viejas que te hacen daño y te enferman y perjudican . Después de. La muerte de papa tomé conciencia que mi vida no era sólo el como siempre lo había pensado
Todo giraba alrededor de su persona. Hoy con su ausencia puedo moverme libremente y ayudar a quien lo necesite y pasear en la medida que pueda como si hoy fuera mi último día. Dios quiera que muchos puedan entender y poner en práctica tu consejo. No hace falta viajar pero si mirar a alrededor tuyo para hacer feliz a alguien y sentirte gratificado. Gracias Juano. Te amo
6 junio, 2016 a las 8:42 pm
Deberías aclarar que sos mi mamá porque el «te amo» final puede generar confusión! Mi idea no era hacerte emocionar tanto pero creo que conmoverse tiene que ver con abordar el tema como a uno le «sale». Gracias por ser mi fan!
6 junio, 2016 a las 1:20 pm
Muy pero muy bueno.
6 junio, 2016 a las 8:42 pm
Gracias Leo! de verdad gracias por tomarte unos minutos para leer esto que pasaba por mi cabeza e intenté ordenar…
22 agosto, 2020 a las 12:14 pm
Excelente lo que escribiste!
6 junio, 2016 a las 4:46 pm
Emocion pura. Tema muy dificil para mi aun. Me gusto leerlo, tratar de entenderlo desde esos puntos y como me llega. El cancer a mi me dio una 2da oportunidad, evidentemente me faltaba cosas por vivir. Las estoy transitando si bien me siguen faltando cosas hoy podria decir que estoy en proceso de cambiar eso que para mi es dificil hasta escribirlo. Te felicito me ayuda el post.
6 junio, 2016 a las 8:44 pm
Me emociona el solo hecho de pensar que pudo ayudarte lo que escribí. Me genera fuerzas para seguir escribiendo. Esas 2das oportunidades a veces sirven muchísimo para valorar lo que se tiene. Gracias por tu confianza y contarme un poquito mas de tu realidad. Un gran abrazo!
6 junio, 2016 a las 5:35 pm
Hola Juano! Me sumo. En el 2001 el corralito se quedó con lo que iba a usar para no alquilar más. Mis varones tenían 14, 11 y 10. Los reuní, y les propuse, en vez de casa, que elijan el viaje de sus sueños. Que lo íbamos a hacer de a uno, de mayor a menor. Porque eran los 3 distintos, y el sueño era personal. Y además, alcanzaba para hacerlo de a uno, así el siguiente me daba changüí para ahorrar. Con el mayor fuimos a Egipto. Con el del medio, a Sudáfrica y a Zambia. Y cuando le tocaba al menor…cedió su viaje para que viajáramos los 4 juntos xq el mayor terminaba 5to.año y posiblemente iba a ser la última vacación juntos. Nos fuimos a Brasil. Y en la playa tuve el primer síntoma de lo que me detectarían después: esclerosis múltiple.
Hace 3 años, ya en silla de ruedas, quiso el Cosmos que me invitaran a España. Y el Cosmos redobló la apuesta, y me consiguió dos entradas para ver el Barça contra el Real Madrid. Fui con el más chico. Los dos futboleros…en la gloria. Y de alguna manera…saldaba la promesa del «Viaje de tu sueño» con los 3.
Y porque el Cosmos me desafía al «dalequevospodés» en noviembre del año pasado en estos pasajes superbaratos encontré Lisboa en abril. Compré dos tickets, para ir con el menor q sigue viviendo conmigo.Y ama el fútbol como yo.
No sólo me enamoré de Portugal, sino que la fecha coincidió para ver 1/4 de final vuelta de la Champions -Benfica vs Bayern- y Depo La Coruña versus Barça de nuevo…y el mismo Hotel que mis superhéroes blaugrana!
Ya lo dice el PadreNuestro…»ahora y en la hora de nuestra muerte, amén».
Prefiero ahora. Exprimir cada segundo. Nada como tocar el cielo con los hijos.
Ya tengo un nieto…y seguiré viajando, hasta que el destino me deje.
Salud!!!!!!!
6 junio, 2016 a las 8:48 pm
Nora!!!! que lindo! Realmente emocionante. Tus hijos jamás olvidarán lo que les dejaste y seguramente los recuerdos que primero recordarán serán los viajes en familia. La frase de Randy “Intento ponerme a mí mismo en una botella que algún día aparecerá en la playa para mis hijos“ me pareció reveladora. Un gran saludos para vos y tus «pequeños». Juano
6 junio, 2016 a las 6:33 pm
Coincido. Tengo 40 años y la muerte no la tengo asumida. Quizás porque por diversos motivos no me siento feliz con lo que en algún momento la vida me condicionó a elegir. Pero algo tengo claro, es que el tiempo pasa y no vuelve y a ese tiempo hay que aprovecharlo viviendolo. Mi madre tiene casi 70 y la lleve de viaje con mi suegra para crearnos recuerdos mi y mi pareja para cuando no estén. Llevamos este año de viaje a nuestros sobrinos para que nos tengan en sus recuerdos en el futuro, de una manera feliz y positiva. He sufrido en mi vida, más que algunos y menos que otros, pero si algo me he propuesto es vivir en el goce. Ni veo películas de dramas verídicos, veo comedias y programas que me hacen reír. Elijo comer lo que me gusta y sobre todo viajar lo más que pueda, hasta donde me de el presupuesto y más. Para disfrutar la vida que tengo y disfrutar a mi pareja porque no sé hasta cuando vamos a estar cualquiera de los dos. Tengo la posibilidad de hacerlo y no disfrutarlo es in pecado. Y a pesar de ser un comprador compulsivo, por momentos necesito desesperadamente achicarme en espacios y pertenencias. Te entiendo y me encanta lo que escribiste. Porque más de uno siente como vos y el que vos lo escribas hace qué uno no se sienta tan loco. La gente no muere cuando es recordada. Por eso hay que generar momentos imborrables y hermosos para que sentir siempre presentes los que uno ama cuando físicamente se vayan, y para que los que uno ama, nos puedan sentir presentes cuando nos toque nuestro turno. En definitiva, hay que ser felices porque la vida es la improbabilidad más remota de que el espermatozoide qué sos vos ganó entre tantos millones. Esa improbabilidad hay que celebrarla como tal, y ningún homenaje es más apropiado que ser auténtica y completamente felices.
6 junio, 2016 a las 8:52 pm
Coincido totalmente. Gracias por tu comentario!!! Es verdad lo que decís de la «improbabilidad». Me gusta pensarlo de esa manera. Seguramente tu mamá y tu suegra, como tus sobrinos, van a recordar siempre ese regalo intangible pero imborrable. Gracias por dedicarte unos minutos a leer el blog! saludos!
6 junio, 2016 a las 8:58 pm
Es emocionante leerlo, pero más emocionante aún es ver día a día que cumplís esto que escribiste. Abrazo grande
6 junio, 2016 a las 10:17 pm
Me he quedado sin palabras. Excelente y totalmente realista.
Hace 2 años estoy en un trabajo que me implica estar lejos de mi familia y tomar 100 vuelos por año. Hace menos de 1 año empece a plantearme estos temas que bien volcaste en el post. Estoy dentro de los que no hablan del tema y aun no logre resolverlo.
Solo me sale…..Chapeu…..
7 junio, 2016 a las 1:41 am
Que lindas palabras Bernie. Como dije en otro comentarios, si te hizo pensar escribirlo tuvo sentido. Gracias por comentar y dedicarle tiempo a pasar por el Blog. Saludos! Juano
7 junio, 2016 a las 12:55 am
Abordaste muy bien este tema al que muchos nos resistimos y reconozco sin pudor que soy una de ellas! Enriqueciendo aún más este emotivo post, están los comentarios de tus lectores con testimonios contundentes.
Más que nunca se aplica el dicho: no dejes para mañana, lo que puedes hacer hoy.
Hasta pronto!
7 junio, 2016 a las 1:46 am
Gracias Betty. Sé que no es fácil para vos y por eso valoro tu aporte. Y los comentarios fueron una caricia al alma. Abrazo! Juano
7 junio, 2016 a las 2:23 am
Excelente relato, enfrentando con mucha reflexión una realidad.Carpe Dien no dejes para mañana lo q puedas hacer hoy.Besos
7 junio, 2016 a las 2:26 am
Gracias Marilé! Es tal cual. Llevarlo a la práctica cuesta. Es un proceso. En ello estamos embarcados…
7 junio, 2016 a las 2:37 am
Me encantó tu post! Hace poco tiempo sentí que lo hecho en mi vida tenía sentido y me desespera un poco pensar en la finitud…Quiero vivir intensamente viajando… Mi pareja no lo entiende así, el trabajo es prioritario y un viaje en soledad está fuera de discusión. Compartiré lo que escribiste, quizás… quién sabe…Abrazo!
7 junio, 2016 a las 11:49 am
Hola Ceci. gracias por dejar una pedacito de tu realidad en este comentario. Toda una definición en 4 palabras!! «Quiero vivir intensamente viajando…». Si te sirve, en nuestro caso no fué de un día para el otro, fué un proceso en el cual por suerte mi esposa apoya. Pero no creas que fué facil. Quizás conquistando pequeñas cosas de a poco es un buen comienzo. De nuevo gracias!!
7 junio, 2016 a las 3:09 am
Soy Leo el de mas arriba, el que escribió antes de la crack de Margarita (o sea tu vieja). Cuando leí el titulo, pense que iba a tratarse de otra cosa; pero no, y me gusto mucho lo que leí. A los 35, y después de haber aprendido a convivir con una muerte «injusta» (porque soy de los que creo que a esas muertes no se las supera, sino que se aprende a convivir con ella) le dije a mi vieja si quería conocer Italia, con lágrimas en los ojos la respuesta fue un tibio si; aunque por dentro yo sabía que era un SI a gritos. Económicamente podíamos hacerlo, me puse en campaña, y allá fuimos. Si bien yo había hecho varios viajes antes; éste fue distinto, emocionante al mango, disfutable en todo, 18 dias mano a mano con mi vieja (y eso que trabajo con ella), pero ésto era otra cosa. Asi que, si alguno no se convenció con el post; agarren a su madre, padre, abuelo/a, hijo/a; y metan un viaje a donde sea, no se van a arrepentir y van a sentirse un poco mejor.
7 junio, 2016 a las 12:00 pm
Gracias Leo!! sos grande! que buen viaje con tu mamá! El año pasado fuimos con mi mamá a España e Italia. Estuvimos con el Papa. Nos movíamos de 6 porque estaban mi esposa e hijos. Ahi surgió ir a Disney. Pudimos hacerlo este Febrero de este año. Mi mamá no dejó una montaña rusa sin disfrutar. Ahora tengo que explicarle que no siempre será de la partida jejejejjeje
Ese viaje con tu vieja seguramente será inolvidable para ella, pero por lo que transmiten tus palabras, también lo fué para vos. Gracias por tu comentario lleno de pasión!
7 junio, 2016 a las 2:30 pm
Todos los comentarios, tanto como el disparador inicial, tienen condimentos muy esenciales a la hora de decidir que dejar, que disfrutar y con quienes compartir ante un eventual final, por ejemplo tengo 62 una madre por cumplir 83 y siento que que estoy en falta en disfrutarla mucho mas. Gracias por todas las palabras de reflexión que he leído. Juan creo que no podría ser si no fuera disparado por vos . Te quiero
8 junio, 2016 a las 12:37 am
que grande Alberto! La pelota está de tu lado. Reservá un hotel en Mar del Plata, pasá a buscar a Rosa y se van un viernes hasta el domingo. Almuerzo en el puerto y no se lo olvida más!!
7 junio, 2016 a las 5:31 pm
Juano me encanto tu post. Coincidimos 100% por ello dejamos todo, reducimos nuestras ambiciones materiales para llenarlas de espirualidad de viajes. Hoy con 40 y 35 años damos la vuelta almundo, al mundo que podamos a nuestro mundo wwwww.realtrip.travel exitos
8 junio, 2016 a las 12:39 am
Hola Oscar. Que sana envidia! estoy leyendo tu post. Espectacular!!! los felicito y seguramente nos cruzaremos en comentarios bloggeros. Saludos a Fabi
8 junio, 2016 a las 2:18 pm
Muchas gracias Juan Manuel por compartir tu camino espiritual que has hecho con tu familia. Desde esa atalaya puedes contemplar la vida con mucha libertad interior viviendo la verdadera pobreza evangélica que nos permite viajar por este mundo con valijas livianas…
7 enero, 2017 a las 6:40 pm
Un placer de tu parte, de quien aprendí «viajar por este mundo con valijas livianas». Abrazo muy grande querido Eduardo.
9 junio, 2016 a las 2:35 am
Juano sos groso, sabelo 🙂
Por suerte tengo ambos padres, el año pasado pude viajar con mi vieja a Francia, su sueño de toda la vida y espero poder volver a hacerlo, lo mismo con mi viejo. Ahora me cebaste :p
Un abrazo.
9 junio, 2016 a las 7:29 pm
Hola Filangie! que honor tu paso por este incipiente blog! Me alegro que te haya cebado. No hay mejor regalo para ellos. Las escapadas individuales con una madre/padre deberían ser obligatorias en el estatuto de las parejas. Al menos una vez cada tanto. Abrazo y gracias de nuevo por darte una vuelta por JuanoFlyer.com
13 junio, 2016 a las 8:36 pm
Hola Juan, que lindas reflexiones, con una profundidad y claridad admirables!!! Confieso que se me piantó un lagrimón por los viajes que no hice con personas que ya no están. Pero bueno, no es tarde para empezar a viajar con los que aí están. Por eso me llevo a la familia en un crucero y estadía en una isla paradisíaca (donde dice crucero debe leerse catamarán por el Delta y donde dice Isla paradisíaca debe leerse Isla Martín García, jajaja). Abrazo enorme, amigo enorme.
13 junio, 2016 a las 9:00 pm
Gracias Fer!!! Nunca es tarde y ningun lugar es el indicado. La idea es viajar. El viaje en crucero a Isla Martin Garcia me dió ganas! Contame como va y me sumo la próxima. Muchas gracias por darte una vuelta por el blog!
13 agosto, 2016 a las 1:40 am
Juano….dando vueltas por twitter…leyendo blogs varios…floxie…infoviajera…etc…llegué a un tweet que decia «Cumple 3 meses mi blog»…justo estaba en el subte y el 3G no suele ser constante…asi que bloquie el celu en ese tweet para verlo mas detenidamente en la estacion que bajaba.
Llegue, bajé del vagón, me conecte al Wi-Fi….y me puse a leer este posteo….me encanto….pasé al siguiente….»menos resulta mas»….me pareció excelente…..después empecé a leer los comentarios que dejaba la gente….las respuesta a esos comentarios….atrapante!….Levanté la vista y pasaron por lo menos 10 minutos que estaba parado ahí leyendo en la pantallita del celular…estaba llegando tarde al trabajo!……Es un signo de todo el entusiasmo y pasión que tiene este lugar de parte tuya. Te felicito!!!
A mi me apasiona viajar también….sobretodo al Nordeste de Brasil…y siempre hice «aportes» a foros standard (tripadvisor y similares) pero este como el tuyo mas «artesanal» me encantó! E Hizo que siendo casi las 11 de la noche…me ponga a pensar en crear algo similiar…asi…bien personal…para intercambiar estas vivencias…experiencias y animar a otros a hacer lo mismo.
Nuevamente….Te felicito por este espacio….por las notas…el logo de la mochila….y las ganas que me pasaste de arrancar a armar uno!!!!
Gracias!!
Gonzalo
13 agosto, 2016 a las 1:55 am
Hola Gonzalo!!! Muchas pero muchas gracias por tu mensaje. No sabes lo que lo valoro. Me encantó que te haya servido de disparador! Y arrancá con el Blog. Yo lo inicié sin un objetivo claro más que dejarle a mis hijos una guía de sus viajes y me terminó gustando muchísimo esto de escribir. Abrazo grande y de nuevo gracias por este GRAN comentario.
15 septiembre, 2016 a las 2:47 am
No se cuando pueda darte las gracias personalmente chamigo…..! pero seguro va a ser muy gratificante poder darte un abrazo… gracias chamigo…! muchas gracias
15 septiembre, 2016 a las 11:08 am
Miguel! no hay nada que agradecer. Si te gusta viajar seguro nos encontraremos! A celebrar la vida y a viajar!
22 octubre, 2016 a las 11:57 pm
Hermoso post Juano, llegué a tu blog por el Tweet del Llao Llao y me encantó como lo relataste, ahora leo ésto. Yo voy a llegar a los 50 y la vida hace varios años (2009) nos dió 3 golpes duros, desde ahí, si bien ya viajaba bastante lo hacía más que nada como un desafío personal, pero aquella vez me había propuesto dar la vuelta al mundo con mis hijos, buscaba lo mismo, dejar algo para cuando ya no esté. Estuve cerca de cruzar la línea a los 41 años y me asusté. Viajamos en auto con la fía hasta los EEUU y al volver estaba muy perdido y creo que a toda ésa confusión la canalicé trabajando. Me encantó tu blog porque es una cachetada a algo que ya me estaba dando cuenta pero no me caía la ficha, ESTOY ACUMULANDO MUCHAS COSAS MATERIALES y antes tenía nada, ahora tengo 2 autos, gastos varios de una casa chica pero con terreno grande que cuesta mantener y muchos impuestos que pagar, contador y bla bla bla bla que no sé en qué momento me puse a coleccionar. Gracias por la data, igual hay algo que también coincidimos, YA ESTOY LISTO, éso fue en el año 2012, en PHOENIX que me di cuenta que ya estaba todo dicho, todo cumplido, a la salida del show The Wall con Roger Waters, éra el último sueño que me faltaba cumplir, ahora tengo que inventar otros pero me doy cuenta que sumo cosas que deseo pero los sueños están. Tengo esposa y dos hijos más que maravillosos, qué más puedo pedir si hasta conozco a Floxie sin careta ja ja ja ja ja
Abrazo, nos cruzarán las rutas, por aquí eres bienvenido, muchísimas familias viajeras y bloggers han pasado por «El Rancho Che Toba» 🙂 (Villa María, Córdoba)
23 octubre, 2016 a las 1:01 am
Ufff. Que fuerte y que bueno a la vez lo que me contás. Nada como darse cuenta «a tiempo». Nos queda mucho camino por delante pero vivirlo con esa perspectiva es muy lindo. Si estás interesado en reducir bienes materiales, te dejo este post con mi experiencia: https://juanoflyer.com/2016/08/09/cuando-cambias-tu-vida-por-viajar-y-menos-resulta-ser-mas
Veo que estámos en la misma sintonía. Hasta conozco a Floxie sin careta también jajajajaja
Tendremos que pasar por el «El Rancho Che Toba».
Yo leo tu blog hace un tiempo, de hecho te voy a hacer unas consultas sobre TAMPA que leí y ví videos al respecto de sus parques. Abrazo grande! A viajar y vivir con menos bienes y mas momentos!
15 diciembre, 2016 a las 1:45 pm
Gracias por hacerme llegar tu post Juano! Me encantó! Yo también hice una limpieza una vez, pero medio a la «fuerza» y aprendí mucho de eso. A los 19 me regalaron un auto, trabajaba para pagar seguro, patente y nafta… porque básicamente me alcanzaba para solo eso. A los 22 lo vendí y me fui de viaje, de mochila. Al principio llené esa mochila con de todo.. en Tucumán, habiendo cargado la mochila 5 cuadras… me di cuenta de que necesitaba reducir todo eso. Dejé muchas cosas en la casa de mi tia. En Ecuador, habiendo cargado la mochila unos 3 o 4 meses, aproveché que habéa ido mi prima a visitarme y me deshice de mas cosas. Me quede con tres pares de medias, tres bombachas, un corpiño y dos bikinis, dos remeras, dos shorts, un vestido, un pañuelo, un par de ojotas, las zapas de trekking (siempre puestas) y una campera. Listo. Bueno.. la bolsa de dormir, una toalla de microfibra y un set de marmita.
Ese peso tan gráfico que representaban «las cosas materiales» en mi espalda, me hizo prestarle atención a eso… a cuanto mas de nuestra energía consume una mochila llena de cosas, una casa llena de cosas, una vida llena de cosas.
Apoyo 100% tu cambio, cada tanto hace falta hacer esa limpieza. Uno no se da cuenta cuando empieza a acumuluar. Ayuda a mantener un orden, sobre todo interno.
Te dejo un abrazo para vos y tu familia. Sin dudas recordarán siempre los viajes y momentos juntos!
16 diciembre, 2016 a las 10:59 pm
Hola Clyde. Que lindo leerte y sentir esa sintonía en estilo de vida. Garcías por tu hermoso comentario. Un gran abrazo!!
4 enero, 2017 a las 5:00 pm
Gracias Juano, me quedo reflexionando sobre tu post. Felicidades en este nuevo momento del 2017, que tus deseos se cumplan y que vivas por siempre con tu hermosa familia. Recuerdos imborrables quedarán para todos. Inmenso abrazo. Gracias por compartir tus experiencias.
Rod.. ( C.A.B.A. – Argentina)
4 enero, 2017 a las 6:35 pm
Gracias Rodrigo. Excelente 2017 para vos también… sin dudas los momentos quedarán a fuego, mas que cualquier regalo material. Saludos!!
4 enero, 2017 a las 5:10 pm
Viajar es lo único que nos llevamos cuando partimos.- Tengo como regla empezar a planear el próximo viaje cuando todavía estoy disfrutando del último. Disfruto del día a día, pero siempre en mi horizonte hay un viaje.- Excelente tu comentario, saludos!
4 enero, 2017 a las 6:27 pm
Diego, comparto al 100% tu filosofía! vamos por mas viajes!
4 enero, 2017 a las 9:38 pm
Te felicito por la decisión!
Vi el video de Randy hace unos años, me conmovió pero me encantó el enfoque que le diste.
Un abrazo!
6 enero, 2017 a las 2:53 am
Gracias Marcelo. Imposible quedar indiferente luego de ver ese video. Y más si tenes, como mi caso 3, hijos como Randy. Muchas gracias por pasar y comentar!
6 enero, 2017 a las 3:31 am
Hola y gracias. Yo viví la enfermedad, y pasé por cada una de las fases que describís, Me identifico con cada una de tus palabras cuando hablas de la vida y de la muerte. Te deseo un año lleno de experiencias hermosas. Sigamos viajando y honrando la vida! Saludos.
6 enero, 2017 a las 3:34 am
Hola Clementina. Gracias por tu confianza. Si tenes un minuto leete el POST «Finalmente no me morí a los 40″… Es una continuación de este… Que tengas buenas noches y también un gran 2017. Juano
18 mayo, 2017 a las 6:50 pm
Gracias. Lo lei, y me resultó muy emotivo porque es exactamente así. Cuando contemplas la posibilidad de una muerte cercana, esos siete puntos son lo único que importan. Yo finalmente tampoco me morí a los 40, pero gracias a la enfermedad, me di cuenta de qué se trata realmente la vida. Ahora sólo queda celebrarla! Y también para mí, parte de esa celebración, es viajar. Un abrazo!
18 mayo, 2017 a las 11:00 pm
Es tal cual Clementina… Somos varios los que andamos en lo mismo 🙂 te mando un abrazo!! Juano
6 enero, 2017 a las 12:42 pm
Hermoso post!!!! Realmente hay que aprender a soltar lo material y apegarse a las experiencias.
6 enero, 2017 a las 12:52 pm
Hola Gaby! Muchas gracias por pasar y comentar. Es así, pero a veces cuesta darse cuenta. Saludos!! Nos seguimos leyendo
6 enero, 2017 a las 1:27 pm
malisimo lo de segun el sexo del hijo. lleva a tu hija de viaje y q tu mujer lleve a alguno de tus hijos
6 enero, 2017 a las 1:36 pm
Puede sonar feo, pero fue una manera de obligarnos un primer viaje. Luego, ojalá, vegan otros como vos decís. Gracias por comentar Rocío
6 enero, 2017 a las 1:50 pm
Juan me encanto el post. Yo viajo todo lo que puedo. Coincido con la filosofía de arrancar a pensar y planificar durante el viaje anterior.
No tengo otros placeres caros. Disfruto de cocinar, leer, estar con amigos y VIAJAR. Ahorro y trabajo para eso.
Por circunstancias que me tocaron -como separarme con un nene chiquito y un viaje por delante ya pago- fue que invite a mi madre a compartirlo y vivi una experiencia única. Su felicidad inmensa de poder acompañarme, estar con su nieto y conocer lugares geniales e impensados en ese momento para ella (Antillas holandesas y Panama). La mía de verla disfrutar, compartir y haberla podido invitar.
El viaje siguiente invite a una de mis sobrinas de 19 años que jamás había salido de su ciudad a que me acompañe a un congreso a Costa Rica. Me lleve a mi peque y fuimos un trio espectacular. Hoy leo orgullosa sus mensajes desde Canarias donde esta viviendo por unos meses donde me dice :» tia vos me contagiaste y me enseñaste que viajar es lo más hermoso que me puede pasar»
Hoy llevo por el camino de la adicción a mi pareja y nuestra hermosa familia ensamblada con 4 chicos de muy distintas edades. En nuestro primer viaje todos juntos vivi uno de los momentos más hermosos cuando durante la cena los mas grandes me dijeron: «que genial haber venido Lucre, nos encanta todo, gracias por ocuparte» …entonces ahí te das cuenta lo mucho que valió todo el tiempo buscando pasajes, tarifas, hoteles, y destino para disfrutar. etc.
Por último, rescató lo que pones de sumar a alguien que este solo en los viajes familiares. A mi me toco sumarme con dos familias vecinas con niños. Me invitaron a sumarme a su viae ya riganizado en un momento triste y difícil para mi y la experiencia fue genial. No lo voy a olvidar más y siempre super agradecida de que lo hayan hecho.
Siempre me repito que la vida es ésta. una sola. no hay revancha….entonces a disfrutar y viajar.
Cariños y felicitaciones por el Blog. Sos crack y adoro leerte
7 enero, 2017 a las 6:39 pm
Hola Lucre. Me sentí muy identificado con tu frase «no tengo otros placeres caros. Disfruto de cocinar, leer, estar con amigos y VIAJAR. Ahorro y trabajo para eso». Estamos 100% en sintonía. Muchas gracias por pasar por JuanoFlyer y comentar. Nos seguimos leyendo. Saludos!
9 enero, 2017 a las 9:05 pm
Me encantó tu «post». Coincido plenamente. Mi vida gira en torno a mis viajes. Trabajo en algo que no me gusta mucho solamente porque lo veo como un medio que justifica es fin: VIAJAR. A cualquier lado, aquí a Tandil a sacar fotos o a Nueva Zelanda a visitar a mi hijo, lo que sea…
Uno de mis primeros viajes grandes fue llevar a mis hijos a Europa luego de un año de muchos pesares. Y siempre sostengo, no sé si les dejaré casas (no creo), ni dinero (menos que menos), sí les dejaré esa experiencia y otras que vinieron después.
Sigamos viajando y compartiendo!!!
Feliz 2017 lleno de planes y viajes!
9 enero, 2017 a las 9:09 pm
Hola Paula. Que lindo ir sumando locos lindos que disfrutan de la pasión viajera sin pensar que la plata en viajar es solo un «gasto». Me robo tus palabras «sigamos viajando y compartiendo». Que tengas un gran 2017. Saludos! Juano
25 marzo, 2017 a las 2:47 pm
Hermoso post. Yo creo haber empezado hace un tiempo, un proceso similar. Quizás no tan intenso, pero creo que lo importante es estar en el camino.
Esto que escribiste me deja con un sabor a «Ay, me tengo que apresurar a vivir un poco mas antes de…» y me encanta.
Abrazo!
25 marzo, 2017 a las 6:47 pm
Muchas gracias Noe. Siempre digo que tomar conciencia del tema es haber resuelto el 50%. Si ya estás en camino de cambio, es cuestión de tiempo lograrlo.
Gracias por tu visita al blog y por comentar
31 marzo, 2017 a las 2:46 am
Hermoso relato, un canto a la vida y sobre todo un gran homenaje al «Vivir»
2 abril, 2017 a las 2:48 pm
Gracias Paula. Si, como vos decís, al «vivir» el día a día. Saludos y gracias por tu paso por JuanoFlyer
2 abril, 2017 a las 9:48 pm
Muy buen post, creo que la vida es mejor cuanto menos cosas tenes, si bien hay objetos que nos son muy significativos, el valor de éstos esta dentro de nosotros y no en la cosa.
En 3 meses nos vamos a ir a vivir a España con mi esposa y hace un tiempo empezamos con el proceso de «vaciar nuestra mochila» para llenarla de nuevas experiencias.
Muy bueno el blog
3 abril, 2017 a las 12:17 am
Hola Tato. Tenés razón. Por eso me gusta la frase que dice que solo hay que mantener los objetos que tienen algun otro valor que la mera posesión… Existos en esta nueva aventura española. A que ciudad van? Saludos!
10 abril, 2017 a las 10:07 pm
Hola ! Te estoy siguiendo en twitter con el Camino a Santiago y me pasé por acá a ver si encontraba algo más del viaje.Te felicito Juano por tus reflexiones y la forma de transmitirlas.Es muy inspirador leerte.Me dejaste pensando…
16 mayo, 2017 a las 12:20 am
Hermoso texto, pero debo decirte que en realidad lo leí por el título convencido que se trataba de otra cosa… algo que me pasó y que finalmente tiene que ver con tu post.
Van a cumplirse 2 años de la muerte de mi segundo hijo y eso desencadenó varias decisiones de índole familiar; una de ellas VIAJAR! Y no a mera manera de “tratar de olvidar” si no de tratar de aprender a disfrutar la vida. El viaje une, forma y transforma!
Luego de nuestro duró momento familiar muchas cosas se volvieron irrelevantes y otras que pasaban desapercibidas son centrales hoy en nuestra vida familiar; sin dudas viajar es una de ellas.
Gran post! Felicitaciones
16 mayo, 2017 a las 12:57 am
Hola Nico. Siento mucho lo de tu hijo. Justamente por casos dolorosos como el tuyo es que creo tenemos que reaccionar mientras gocemos de salud y tengamos salud en la familia. Uno no sabe cuando todo se puede quebrar y es el HOY lo que cuenta. Te agradezco la confianza y tu testimonio. Abrazo grande
18 mayo, 2017 a las 1:31 am
Como me hiciste llorar… pero abriste mi corazón y de cierta manera lo leíste… Pienso igual, solo que no tenía las ideas tan ordenadas. Pospuse un viaje con una amiga, que se murió de repente y todavía lo lloro. Por suerte no pospongo viajes con mi marido y mis dos maravillosos hijos. Gracias, gracias, gracias! Pilar
18 mayo, 2017 a las 2:01 am
hola Pilar! siento mucho lo de tu amiga. Quizas su partida tuvo el sentido de «marcarte» para que no pospongas más lo que consideres esencial en tu vida. Te mando un abrazo muy grande y a celebrar la vida! Juano!
18 agosto, 2017 a las 2:35 am
Hermoso texto, hermosas palabras…. Me sentí muy identificada, gracias!!!!!!!
Te deseo lo mejor, a vos y a tu familia y espero seguir leyéndote por mucho más tiempo!!!!
7 septiembre, 2017 a las 9:48 pm
gracias Ceci por tu buena vibra. Nos seguimos leyendo por mucho tiempo seguramente!!
7 enero, 2018 a las 6:31 pm
Excelente post, me siento muy reflejado, ya que desde hace 10 años empecé a viajar con mis tres hijos. Primero recorrimos Argentina, luego América latina y después el resto. Llevamos recorridos unos 24 países y unas 80 ciudades en cuatro continentes, siempre viajando y comiendo como locales y sólo con equipaje de mano. Para el objetivo de viajar y seguir viajando dejamos de consumir y gastar en muchas cosas que hoy nos resultan absolutamente prescindibles y aprendimos a valorar los increíbles e inolvidables momentos que te regalan cada viaje.
16 enero, 2018 a las 3:11 pm
hola Carlos! muchas gracias por tu comentario. Me das esperanzas de seguir viajando. Por momentos se hace cuesta arriba con 3 hijos pero se puede. Y claro que podemos prescindir de tantas cosas! pero uno no lo vé…. Que motivó tu cambio? hubo «algo» en particular?
12 marzo, 2018 a las 5:23 pm
En casa compartimos esa filosofía de vida, por ejemplo, hace unos años que tratamos de regalar a los niños de la familia y ahijados una “experiencia” o un “momento”. A veces ha sido incluso un paseo gratuito (ej: día free en el Jardín Japonés) otras una entrada al cine, a un recital, a un museo o tantos lados lindos que hay para visitar sin ir muy lejos.
Recuerdo con mucha felicidad salidas de mi infancia en tren con mis abuelos “¡a la Capital!” a pasear por la Costanera, a ver un circo o una obra de teatro. Deseamos que los niños que hoy nos rodean (sin ser aún abuelos!!) nos recuerden a nosotros también.
Y otra cosa: en la época del corralito, con la Plaza en llamas, recuerdo haber pensado: qué suerte que viajé todo lo que estuvo a mi alcance. Pensaba que nunca más tendría la posibilidad de viajar al exterior con ese salto de la divisa. La posibilidad volvió o vuelve de a poco, aunque sigue costando mucho más que antes, que “cuando éramos ricos y no lo sabíamos” (1USD=1ARS), pero tratamos de tener siempre entre nuestros sueños, hacer un viaje en familia.
Aplaudimos la consigna y tu iniciativa de tener menos bienes y más momentos.
Vamos Juano que al parecer somos varios los que estamos en la misma sintonía!
15 marzo, 2018 a las 12:39 am
hola Paola! Buenas noches. gracias por tu mensaje. Es muy lindo ver que somos muchos los que vamos en ese sentido. Hoy a los chicos les cuesta un poco esta decisión, pero yo creo que a la larga lo van a valorar. Por momentos parece que fuéramos a contramano pero mensajes como el tuyo hacen muy bien.
Te mando un saludo grande y nos seguimos leyendo!
Juan Manuel
19 marzo, 2018 a las 12:11 pm
Hola Juano, me hiciste emocionar y al mismo tiempo, confirmar que hay otros que piensan como yo, sobre la vida, la muerte y los viajes, que llenan nuestra espíritu de energía positiva, un abrazo, José Chamorro
25 marzo, 2018 a las 11:29 pm
hola José. Gracias por tu mensaje. Es así, somos varios! Escribirlo me ayuda a descubrirlo 🙂 Abrazo grande!
19 marzo, 2018 a las 10:08 pm
Hola! Cómo estas? Es la primera vez que entro a tu blog, entré para «chusmear» y me llamó la atención el título de este post. La verdad que me encantó!! Cómo expresaste cada idea y cambio que realizaste, y te doy toda la razón, tengo 25 años, por suerte tengo a mis papás con vida, pero si hay recuerdos que tengo con ellos de cuando era chica, son de viajes, de esas escapaditas de fin de semana al campo en familia, de los viajes largos a Salta o Córdoba (somos de Tierra del Fuego) y siempre los hicimos en auto. Espero el día de mañana poder hacer con mis hijos lo que haces con los tuyos. Me encanta esa idea!!
Gracias por compartir este post con nosotros!! Buena vida.
25 marzo, 2018 a las 11:32 pm
hola Julieta. Gracias por compartir tu experiencia. Sos una niña jejeje Ojalá a tu edad hubiese tenido este panorama claro. Fué a los 33 cuando hice un click… Pero no reniego de nada. Todo ayudó a forjar el Juano que soy hoy. Te deseo lo mismo para vos! Buena vida!!
23 marzo, 2018 a las 4:19 am
Juano, casi me piantas un lagrimón.
La muerte y la enfermada como una condición natural, esperable y desdramatizará, así es como entonces los pensamientos fluirán claramente.
Mi experiencia de VIDA VIAJERA
A los veintitantos decidí hacer el mix de trabajo y placer ( léase trabajo y viajes) …
Siempre viví mi vida como si no hubiese un mañana porque de muy chica mi flia. murió en un accidente (suena duro, fue duro, pero a la vez una gran enseñanza).
A los 35 me diagnosticaron cancer y fue allí donde tuve mayor necesidad de viajar, lo supere y la inercia de los viajes , esa energía renovadora quedó.
Años después saliendo desde eze- a Oslo me sacaron una foto y me vi diferente, tan diferente que entendí que el cancer podía regresar ( y como dicen algunos médicos “hoy hablamos de una enfermedad crónica) —
A los pocos meses ya me lo veía venir y me fui a recibir el nuevo año a la torre Eiffel…
La pelee más allá del gran equipo médico, batalle para que en mi trabajo aceptaran el “home-office” porque mi objetivo comenzó a ser “el próximo viaje” o “el próximo destino”, la gran zanahoria de mi vida.
Hoy definitivamente priorizo viajar, por placer, por trabajo o por lo que sea y siempre les digo a todos : Jamás esperen a que la vida te sacuda para decir lo que es realmente valioso.( aunque suene usado).
El día que ya no esté, puedo decir que “he vivido” y además que lo hice adecuadamente sin dejar cosas por vivir…me iré sin pendientes y con un gran epitafio “me voy de viaje, sola, acompañada o con quien sea…”
25 marzo, 2018 a las 11:44 pm
gracias, muchas gracias por tu experiencia de vida.
Es muy importante leer esto para mi. A veces uno escribe desde la teoría pero sin lugar a dudas la realidad te golpea y se siente.
En mi caso me ayuda a confirmar que voy por un camino que creo correcto. Leer esto me ayuda a mantenerme en esa linea.
Sos muy valiente en compartirlo y ojalá muchos te lean porque estoy seguro no será indiferente para la gran mayoria.
Abrazo grande!
27 marzo, 2018 a las 11:11 am
Te felicito Juanjo!! Hermoso leer esto! Que linda reflexión. Un abrazo grande y gracias por compartir!
31 marzo, 2018 a las 2:09 pm
De nada! gracias a vos por tomarte tu tiempo para leerlo!
13 junio, 2018 a las 12:44 pm
Imposible leerlo sin llorar.
gran reflexion, gran!
19 junio, 2018 a las 12:33 am
Gracias Ale! Abrazo grande y gracias por tu paso por JuanoFlyer!
13 junio, 2018 a las 6:16 pm
Me encanto y lo seguire pensando.muchas gracias!!!
19 junio, 2018 a las 12:32 am
a vos tomarte el tiempo de leerme!!
6 agosto, 2018 a las 2:00 pm
Hermosas palabras, es verdad uno tiene que tratar de no dejar cosas pendiente, a mi me paso y cuando me di cuenta esa persona ya no estaba más… por eso ahora en 15 días le cumplo el sueño a mi mamá! Siempre me pide Playa y ver qué es el famoso all inclusive! Asique como no quiero quedarme más con la sensación de dejar cosas pendiente me la llevo de viaje!
6 agosto, 2018 a las 11:12 pm
Espectacular María Celeste. Te felicito! Ese es el camino!
10 noviembre, 2018 a las 1:00 pm
Extraordinario post, Juano. Coincido en todo lo que expresaste tan claramente. Al igual que muchos de los que ya comentaron, me emocioné mucho. Para mí estan unidos desde los 17 años cuando murió mi papa de un cáncer fulminante en enero del 81 y en febrero, mi madre organizó un viaje a Cataratas. En ese momento, no lo entendí. Pero, luego supe. Y hoy, tengo el mismo pensamiento que vos, Juano. Gracias por el post!
10 noviembre, 2018 a las 8:11 pm
Gracias Delia por tu lindo comentario. Es así, hay que vivir intensamente. Los viajes, como el que tu mamá organizó, creo que tiene que ver con eso. Te mando un abrazo muy grande!
14 junio, 2019 a las 1:15 am
Juano, mis viejos fallecieron a los 50 y 51 años, yo tenía 18. Cuando pude asomar la cabeza después de tanto dolor, entendí que mi camino sería no desperdiciar tiempo. Llevo marcada a fuego la finitud de la vida. Trato siempre de vivir con personas que me alegran el alma, de ser geneross y de reir y hacer reir xq uno nunca sabe a cuantos cura en una carcajada. Tengo 34, un hijo maravilloso con el hombre de mi vida y unas ganas de viajar irrefrenables. Hemos empezado a darle rienda a este placer de recorrer lo que podemos del mundo juntos, y mirarnos a los ojos lejos de casa pero encontrando nuestro hogar en la mirada, es una experiencia alucinante. Seguimos x acá!
14 junio, 2019 a las 12:23 pm
hola Marina,
Que hermoso mensaje y cuanta verdad en tus palabras. Me siento identificado. Lamento lo de tus viejos a tan temprana edad. Creo que difundir casos como el tuyo puede ayudar a que otros tomen conciencia sin tener que pasar por algo tan doloroso. Te mando un abrazo grande y nos seguimos!
15 junio, 2019 a las 12:22 pm
Hola Juano: hace mucho que te sigo en Twitter porque me siento identificado con tus viajes, con tus pensamientos, tus «caminos» y tú alegría de vivir. Estuvimos a punto de coincidir en una visita que hice a Buenos Aires pero no se dio.
Este tema de la muerte es parte de la vida humana. Pero el punto 3 el de viajar, es consecuente con mi vida. Sufrí un infarto en 2008 con menos de 50 años . Al sobrevivir, agradecí a Dios el ofrecerme otra oportunidad de hacerlo mejor. Formé una familia, crecí nuevamente en mi profesión (soy médico) y al despojarme de lo material pude comenzar a viajar. Pronto por mi país y luego por Europa. Ahora lo hago todos los años. Y ya no importa cuándo me voy a morir ni de qué si será con o sin dolor. Los viajes son mi vida, durante la preparación, durante el mismo y al regresar con las fotos vuelvo a viajar cuando quiero. Hace 3 semanas bajé del avión y ya estoy pensando donde ir e. Gracias a Dios mi familia me acompaña y disfruta de esta aventura anual.
No le tengo miedo a la muerte. Me daría pena por ellos el abandonarlos. Sé que será difícil y me inquieta un poco. No te voy a mentir.
Te mando un abrazo enorme y te digo por el pajarito
@gusti260259
16 junio, 2019 a las 9:27 pm
gracias Gustavo! que lindo mensaje. Gracias por la confianza en compartirme todo esto. El ser conciente de la finitud ayuda mucho. Vivimos el «ahora» más intensamente. Siento que somos privilegiados. Te mando un abrazo y nos seguimos!
15 junio, 2019 a las 6:07 pm
Muy buen post! Me has dado algunas ideas. Gracias!!!!
16 junio, 2019 a las 9:25 pm
de nada Laura. gracias a vos por darte una vuelta por acá y dejar un comentario. Slds!
11 agosto, 2019 a las 2:26 pm
Muy bueno tu texto! Emociona! Gracias por compartirlo!! Me sentí identificado con tu relato.
27 agosto, 2020 a las 10:34 pm
Hola Juano, que hermoso lo que escribiste, siempre sentí lo mismo, y gracias a Dios pude hablarlo con mi padre y con mi hijo. En 2013, viaje con el a España, la gloria!!! y el año pasado, volví a recorrer España, esta vez con mi ahijada. Realmente inolvidable, viaje, lleno de vivencias familiares-ancestrales. Gracias por poder expresarme acá- Buen Camino de Santiago (me encantaría ser de la partida). Un fuerte abrazo- Bendiciones.
10 septiembre, 2020 a las 8:01 am
Juano,
Le leí este post a mi mujer desayunando pan con tomate en una terraza valenciana (de Paterna para ser exacto). Lloramos y reímos. Sos un grande, gracias compartir tu sabiduría. Abrazo
19 septiembre, 2020 a las 5:59 pm
Hermosísimo. Creo que seríamos más felices si viviéramos así. Gracias por compartirlo !!!